lunes, 25 de enero de 2010
PARTICIPACION !ULTIMA PROPUESTA!
domingo, 24 de enero de 2010
?COMO CONCLUIR?
Dudar…
Al inicio de todo, esta la duda; plantear un proyecto para desarrollar a lo largo de tres meses, que enfoque nuestra atención constantemente y tome forma durante el proceso de creación. Táctica de intervención en la esfera publica! Muchas dudas que resolver a partir de este nombre, antes de poder plantear un proyecto.
El simple hecho de tener una idea es causa de cuestionamiento y por supuesto, es aquí donde las “tácticas” comienzan a tomar forma. Creo que en mi caso particular el haber estado tan confundido y dudar en plantear o no un proyecto de este tipo provoco que el trabajo tomara forma, aun no se que forma adopto pero se fue desarrollando paulatinamente, unas veces mas presente que otras pero la información dirigía el rumbo de la investigación.
?Se puede estar harto de la información?
Esto es fácil cuando la información llega a ti y no sabes como organizarla. Se puede volver una pesadilla tener tantas paginas de información como preguntas sobre el arte publico se pueden escuchar, pero en ese momento es cuando el panorama se acota, la información dirige el proyecto, es decir, la información que lees y que posiblEmente no tenga nada que ver con tu primer idea , CUESTIONA. Cuestiona el concepto que te ronda la cabeza y te da mas direcciones posibles por las que puedes enfocar tu proyecto.
Esta claro que los modos de trabajar son individuales y que dependen en gran medida de la educción y la dinámica de trabajo personal, pero de lo que estoy seguro es que en este trabajo fue mas evidente ver que no es posible establecer un objetivo fijo a largo plazo. Hay direcciones que uno intenta seguir y conceptos que piensa aclarar al final de una investigación pero los caminos para llegar se deforman y conforman constantemente.
Plantee un concepto sobre el que quería trabajar, casi aleatoriamente, fue durante la investigación que me percate que no fue así, el concepto de habitar primea en parte mi trabajo y mis proyectos a realizar en este año.
Investigar el modo en que este concepto es considerado por otros autores y por profesionales de diversas disciplinas.
Buscar referentes artísticos que trabajen con dicho concepto de manera plástica, intelectual o estética.
Analizar en conjunto la información, estableciendo comparaciones y puntos en común que puedan describir ampliamente el concepto a desarrollar.
?Como cuestionar ese concepto dentro de un espacio especifico?. Aplicar los cuestionamientos a la realidad despues de haber hecho teoría sobre ellos.
RESPUESTA AL CUESTIONARO
viernes, 22 de enero de 2010
?COMO HACER UN CUESTIONARIO?
martes, 19 de enero de 2010
La revuelta de Los Hijos de Don Quijote Un grupo de franceses consigue un gran impacto social en su campaña de apoyo a los 'sin techo'
Les enfants de Don Quixotte (Los hijos de Don Quijote) son en realidad los hijos de François Legrand y Armelle. Los cinco hijos, los dos varones -Augustin y Jean-Baptiste, de más de dos metros de altura- y tres chicas, dos de ellas -Amélie y Nastasia- de manera especial, son los creadores de esa asociación que, en menos de dos meses, ha transformado el extraño panorama inmobiliario francés. |
Source: El Pais (06-02-2009) |
El Gobierno francés sabe que este grupo, aun siendo pequeño, puede hacer daño Chirac prometió en 1995 acabar con el "escándalo de los que no tienen techo para cobijarse" Extraño porque, en este país, unos tres millones de personas viven en apartamentos insalubres o considerados indignos de acoger a un ser humano, porque entre 80.000 y 100.000 personas duermen en la calle y porque otro millón de personas lo hacen en condiciones precarias: residencia social, habitación de hotel realquilada, en un cámping, en un provisional apartamento de inserción social o en algo muy parecido a una chabola. Y extraño también porque decenas de miles de pisos permanecen vacíos en espera de comprador. El pasado 26 de octubre, Augustin Legrand, de 21 años, actor y antiguo estudiante de Derecho, decidió instalarse bajo el puente de Austerlitz, cobijándose en una tienda de campaña. Quería saber cómo viven los SDF, los Sin Domicilio Fijo, esos miles de personas con los que se cruzaba cada día en París; o, mejor dicho, cuyos cuerpos tendidos sobre las bocas de ventilación del metro esquivaban sus pies. Era una aventura social que comenzó con 20 euros en el bolsillo, con una cámara fotográfica en la mano y acompañado de su cuñado y mejor amigo. Internet difundiría imágenes de miseria del mundo rico. Las firman Les enfants de Don Quixotte. Los Legrand son católicos practicantes. Augustin aún recuerda el problema que supuso para él saber, hace cuatro años, que sus padres se separaban. "Eso me parecía incompatible con los valores y la educación que había recibido", les ha contado el gigantón a los periodistas de Le Parisien. El trauma debió de ser importante, porque a Augustin le faltó tiempo para viajar a Bosnia, primero, y a Zimbaue, Malaui y Mozambique, después. Entremedias, abandonó la dudosa vocación de abogado y se transformó en intermitente del espectáculo, o dicho de manera menos administrativa: en actor. Nadie sabe cuántos son Les enfants de Don Quixotte, pero el poder ha comprendido que aún siendo pocos, tienen capacidad para hacer daño. Manejan bien la cámara y mejor aún Internet. Sus retratos de los SDF son precisos y en unos días de relativa escasez informativa -la ejecución de Sadam no puede ser el único tema- han encontrado un gran eco mediático, máxime cuando las fechas navideñas obligan a una tópica bondad. Y a ser generosos para no aparecer como Mister Scrooge (el malo del Cuento de Navidad de Dickens). En un primer momento, la ministra delegada para cuestiones de Cohesión Social, Catherine Vautrin, acusó a los Legrand de "demagogos" y "mistificadores", porque se solidarizaban con una pobreza que ellos no sufrían. Lo hizo desde los despachos de su ministerio, entre marquetería y terciopelo. Tres días después, sus compañeros de Gobierno intentaban reparar el daño; y así han seguido hasta que el pasado miércoles el primer ministro, Dominique de Villepin, anunciaba que el Gobierno francés se dispone a presentar, el próximo día 17, un proyecto de ley por el que "el derecho a la vivienda" se transforma en algo "exigible" ante la ley, como el derecho a la atención médica o a la educación. "Francia es uno de los países más avanzados en materia social", concluyó el elegante Villepin. Ya sólo falta que los puestos de trabajo también puedan obtenerse gracias a los tribunales. Los Legrand han convertido las 300 tiendas alineadas junto al canal de Saint Martin, frente al falso y mítico Hôtel du Nord, en un punto de encuentro (el hotel se ha construido porque Marcel Carné, en su filme de 1938, rodado en estudio, lo imaginó ahí: la naturaleza imita el arte, tal y como predecía Wilde). Los actores Jean Rochefort y Beatrice Dalle se han asomado por el campamento; hay días en que todas las tiendas están completas y los Legrand se ven obligados a aplicar cuotas a la hora de repartirlas: tantas para extranjeros, tantas para mujeres, tantas para trabajadores pobres, tantas para auténticos SDF... Es la imparable lógica de la sociedad del espectáculo. Les enfants de Don Quixotte, con muy buen criterio, han rescatado promesas de Jacques Chirac de 1995, cuando el actual presidente se hizo elegir como paladín de la lucha contra la "fractura social". Entonces prometía "requisar las viviendas vacías" y acabar con "el escándalo de quienes no tienen techo donde cobijarse". Pero Chirac, ya se sabe, también dice que "las promesas sólo comprometen a los que se las creen", y por eso en 1995 afirmaba que "demasiados impuestos matan los impuestos", para, ocho meses más tarde, ya en el poder, declarar que "hay que aumentar los impuestos para evitar el déficit público". Por eso es lógico que Chirac haya guardado en un cajón los informes elaborados, en 2002, 2003 y 2005, por el Alto Comité para el Alojamiento, y que propugnaba medidas para atender a los SDF. Y más lógico aún que su Gobierno y sus diputados hayan bloqueado el desarrollo de la ley votada en 2000 por los socialistas, que exigía a todos los ayuntamientos de Francia tener en su territorio municipal un mínimo de un 20% de vivienda social. Si ahora Chirac cambia de parecer es porque "en política, lo único que cuenta es ganar", y en su caso, a los 74 años, dado que parece casi imposible que pueda volver a presentarse, lo que cuenta es hacer perder a Nicolas Sarkozy, el traidor que se merece heredar de un buen embrollo. Que los Legrand y Les enfants de Don Quixotte sean ahora los ganadores de la historia es un mero espejismo, pues ¿cómo se resolverá una decisión judicial favorable a conceder un alojamiento a tres millones de demandantes pobres, cuando, en 2005, sólo se construyeron 7.500 viviendas para gente sin recursos? Y ése no es, ni mucho menos, el único punto oscuro de la ley que se quiere aprobar de urgencia. Porque ¿cómo resolver el problema que plantea el que casi un tercio de los SDF sean personas víctimas de trastornos psiquiátricos profundos? Esos hombres, 25 años atrás, habrían estado "aparcados" en condiciones deplorables en centros para enfermos mentales que en su día se cerraron debido a su connotación carcelaria. |
HABITAR CON LA IDEA!
lunes, 4 de enero de 2010
HABITAR - MODIFICAR - HABITAR
LAS FORMAS DE VIDA, DEL HABITAR Y DE LA ESPACIALIDAD HABITABLE. *
Al respecto, se ha destacado que los entornos habitables construidos son mucho más que un mero reflejo pasivo de la cultura o un receptáculo para el comportamiento humano, sino que tienen un papel activo en relación con ambos: el hombre y el entorno construido (Rapoport, 1990)
domingo, 3 de enero de 2010
Habitaciones
jueves, 10 de diciembre de 2009
1. PLANTEAMIENTO DE UNA PRIMER PROPUESTA
El término Habitar deriva del latín habitare que significa “ocupar un lugar”, “vivir en él”, frecuentativo de habere, “haber”, “tener”. Pero, en la actualidad, el concepto de habitar se ha tornado amplio, no tiene límites, es per se mutable y creativo, no existe una receta que diga que se habita mejor de una forma que de otra. Esto es porque la construcción del habitar está sometida a ritmos, impulsos y convulsiones. Según el filósofo alemán Martin Heidegger somos en la medida en que habitamos, ser hombre (y ser mujer) significa: estar en la tierra comomortal, significa: habitar. La apropiación del lugar significa construirlo: habitarlo, en conformidad a la dignidad de las personas.1